Los bebés necesitan mucho cuidado cuando están despiertos razón por la cual llega a ser un alivio cuando duermen.
En cuanto al sueño de los bebés hay muchas cosas que se deben tomar en cuenta, aquí algunos consejos para ayudarte en el cuidado que debes brindarle a los bebés que estén a tu cargo.
Sucede a menudo que los bebés dán la impresión de estar durmiendo menos de lo necesario, el problema es que tienen su propio patrón de sueño, el mismo que puede cambiar día a día y noche a noche.
Los bebés no nacen con la capacidad de dormir toda la noche, van adaptándose a medida que crece su confianza y su conocimiento de éste mundo.
Los bebés recién nacidos duermen la mayor parte del tiempo pese a los ruidos y la actividad que se desarrollan alrededor de ellos. Normalmente, los bebés necesitan alimentación durante la noche por nutrición, y por la comodidad y la cercanía que reciben generalmente de la madre. Si un bebé duerme mucho y no se despierta para alimentarse, podría estar enfermo, en ese caso debes reportarlo a los padres para que se pongan en contacto con el pediatra.
Para que el bebé pueda darse cuenta cuándo es día y cuándo es noche, se debe hablar en voz baja y sólo cambiarle los pañales durante la noche, ésto le ayuda a saber que la alimentación durante el día es diferente en la noche.
Un dato interesante es que las investigaciones sugieren, que el 22 por ciento de los bebés de nueve meses de edad tienen dificultades para lograr dormir y el 42 por ciento se despierta con frecuencia durante la noche.
Los recién nacidos suelen dormir unas ocho horas por la noche, pero no en un sueño ininterrumpido o largo, pueden dormir sólo una hora, o tal vez tres o cinco horas antes de despertar.
La lactancia materna es lo mejor para los bebés, pero los bebés amamantados tienen un sueño más ligero y, probablemente, se despiertan con más frecuencia.
No vale la pena tratar de establecer una rutina de sueño en los primeros meses. Puede resultar mejor dejar que las necesidades del bebé marquen el ritmo hasta que poco a poco aprendan la diferencia entre día y noche.
Los primeros dos o tres meses, un patrón típico es un sueño largo por la mañana y un par de cortas siestas por la tarde. Despertar en la noche es normal, y puede continuar así durante algún tiempo.
Consejos para los bebés difíciles:
- Decidir sobre una rutina, con programa y horario para la alimentación y el baño.
- Dejar al bebé que intente calmarse solo unos minutos – no acudir de inmediato, pero nunca dejar al bebé llorando por mucho tiempo.
- Mantener las cosas tranquilas por la noche, que el bebé no se espere cambiar de repente del juego animado a dormir.
- Algunos bebés son más felices si pueden oír los ruidos del hogar y saber que hay gente cerca.
- Pensar en el estrés familiar, si la familia está pasando por un momento difícil, o usted está preocupada, el bebé puede sentir esto y les resulta más difícil dormir o calmarse.
- Cuando usted está tratando de dormir al bebé, debe quedarse siempre en la zona del dormitorio. No llevarlo a las zonas ocupadas de la casa y definitivamente no a una habitación donde la televisión y la actividad lo mantendrá aún más despierto.
Para los bebés que despiertan facilmente: Pueede ser peor durante el verano, cuando amanece más temprano.
- Obscurecer el cuarto del bebé con cortinas gruesas o persianas
- Trate de poner la hora de dormir a su bebé de más edad un poco después, si lo lleva temprano a dormir es casi seguro que para él significará levantarse más temprano.
Seguridad a la hora de llevar a dormir a su bebé:
El bebé podrá dormir de manera segura si se siguen algunas pautas útiles, sobre la base de la reducción del riesgo de muerte súbita o SIDS (síndrome de muerte súbita del lactante).
SIDS es poco común, y la causa exacta no se conoce. Los investigadores creen que es probable que se deba a una serie de causas diferentes, o a una combinación de factores que afecta a un bebé en una etapa vulnerable de su desarrollo.
- Coloque al bebé sobre su espalda para dormir
- En la cama, coloque al bebé en una posición en la que haya menos posibilidades de deslizamiento por debajo de la cama
- Nadie debe fumar en la misma habitación que el bebé
- No utilizar un edredón, colcha o una almohada hasta que el bebé tenga más de un año de edad
- En interiores mantenga la cabeza del bebé descubierta (o cada vez que entren en lugares cálidos)
- Si el bebé está enfermo, se debe acudir inmediatamente al médico
- Se recomienda tener al bebé en la misma habitación durante los primeros seis meses.
- Si el bebé comparte la cama, mantenerlo a salvo asegurandose que no se caliente demasiado. Es muy importante no dejar que la cabeza del bebé quede cubierta por el edredón o una almohada.
- Alejar al bebé de lugares frecuentados por personas que fumen, usen drogas o medicamentos que inducen al sueño, o que hayan estado bebiendo mucho.
- Recuerde que una cama no está hecha para el bebé, así que tenga cuidado que no se caiga. Asegúrese de que no hay esquinas o bordes afilados duros en el que pudiera hacerse daño.
- No se duerma con él en un sofá, ya que ha demostrado ser peligroso. Es posible que el bebé ruede de esta manera, o puede quedar atrapado entre su cuerpo y un lado del sofá o de sus cojines.